martes, 8 de noviembre de 2011

Descripciones automáticas

"Ligera brisa. Ligera bruma de cortesía, para arribar." Erik Satie

Para recordar el espíritu original de La trampa de Medusa hoy invito a uno de mis fantasmas predilectos: Erik Satie, que además de gran músico –absolutamente genial, deslumbrante por donde se le vea– le dio por ser un buen literato que de vez en vez escribía en algún fanzine vanguardista la columna editorial que lo acompañó siempre y que, amante de lo invariable (siempre cargaba un paraguas… siempre caminaba a donde fuera sin importar la distancia… siempre usaba la misma ropa y después de largas temporadas se la cambiaba… nunca se lavaba las manos, se las raspaba con piedra pómez), siempre titulaba “Cuadernos de un mamífero (extractos)”.

Así publicó mucho a lo largo de su vida. Desde artículos musicales sobre ciertos autores, composiciones o acontecimientos cotidianos que le conmovían, hasta su propia biografía comentada ¡por él mismo! Esta vez sólo tomo un título de tres miniaturas para piano acompañadas de una especie de tres poemínimos (cfr. Efraín Huerta), compuestos para celebrar su cuadragésimo séptimo (47º) cumpleaños en 1913. Estas Descripciones automáticas son un pretexto para recordar a mi mentor cósmico y elaborar un tramposo ejercicio lírico que ya sólo espero sea de su agrado:

Del miedo

Impactante floritura de fierro oxidado, primero. Niebla después, tormenta de arena. Supuesto ánimo rastrero, al final de la jornada.

Pozo de luciérnagas constreñidas. Ansias de vuelo. Paciente interinfancia de reptil. Mar abierto. Empuñadura. Lumbre. Bocanada. Sí.

Sobre el amar

Hornea olfateando. Subyace, se esconde, aúlla.

Implicarte aterroriza. Evitarlo mata. Creer empeora. Camina, deslumbra; crece, abarca: te atoras.

Acecha, aclara; busca, buscas, busca. Desencuentra, mientes, raspas. Zumba, esperas, creas, dices. Mentir. Mentirle. Mentirte. Sonríe, pasa. Importunó.

Y la risa

Tristeza que no sabe. Llanto formalmente inacabado. Es una melancolía venida a menos con incrustaciones de semillitas de girasol. Artificio animal que bien a bien nadie sabe para qué sirve, para qué trota. Lila y luto. Mono araña que chimpancé mosquito que gorila mantis que orangután alacrán, parece más un ratón en las tardes de vino y rosas. Inmundicia de mandarina, suena a noche de jaraneros –eso sí–.

Estos quasi objetos descritos son adornitos que he visto, he oído, sé que existen por ahí. He visitado lugares donde atesoran colecciones impresionantes de cada uno de ellos. Para mí han sido rastros que conducen.

NOTA: Esta vez la obra plástica invocada son unas misteriosas figuritas de la señorona Leonora Carrington, acompañadas de una dupla no menos misteriosa de policías del DF.

4 comentarios:

  1. Acecha, aclara; busca, buscas, busca. Desencuentra, mientes, raspas. Zumba, esperas, creas, dices. Mentir. Mentirle. Mentirte. Sonríe, pasa. Importunó.
    Bueno.

    ResponderEliminar
  2. Sobre Satie. Por los gimnopedistas de los gimnopedistas. Satie.

    ResponderEliminar
  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  4. alcemos nuestras copas ¿no? Gracias por su amable atención.

    ResponderEliminar